Estanqueros exigen se prohíba el uso del Cigarrillo Electrónico en lugares públicos en España

Integrantes del Gremio de Estanqueros de Tabaco y Timbre (Gett) han exigido al gobierno español que aplique regulaciones a los cigarrillos electrónicos, pidiendo una regulación que se equipare a la Ley Antitabaco, con el afán de prohibir el uso de cigarrillos electrónicos en lugares públicos.

Este gremio que pertenece a la Organización Nacional De Asociaciones de Estanqueros de España (ONAE) y está integrado por estanqueros de Andalucía, País Vasco, Aragón y Cuenca, solicitó además al ejecutivo del país que exija sea proporcionada la mayor cantidad de información a los consumidores y evite la llamada "competencia desleal" a las expendedoras.

"La falta de regulación del cigarrillo electrónico supone un agravio comparativo para los estanqueros, sujetos a una Ley del Tabaco muy restrictiva que limita tanto la publicidad como el consumo de los cigarrillos tradicionales" declaró la presidenta de Gett, Ana Meneses, quien manifestó que "el vacío legal del cigarrillo electrónico llega hasta al punto que los estanqueros, sujetos a las 'labores del tabaco', tampoco pueden vender el artilugio".

Los integrantes de este gremio pretenden emular la iniciativa del Ministerio de Sanidad francés, mismo que ya ha determinado que pretende aplicar al cigarrillo electrónico "las mismas medidas que se han llevado a cabo con el tabaco", lo que significa que se pretende prohibir el uso del dispositivo en lugares públicos y se restringirá su publicidad.

"En España, en cambio, solamente han prohibido el 'vapeo' en los vuelos de algunas aerolíneas y en centros de salud como los de Cataluña", declararon integrantes del Gett.

Además recalcan las dudas de algunos organismos de salud sobre los posibles beneficios médicos del cigarrillo electrónico. Conforme a este punto, resaltan que las autoridades alemanas han determinado que "la satisfacción producida por la nicotina no aporta nada a la curación del paciente"; así también mencionan que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no aconseja su uso, hasta que sea comprobada su efectividad, seguridad y calidad por un "organismo regulador competente".

Comentarios