España: Cigarro electrónico: 'top ten' de ventas

Los farmacéuticos han notado en el último mes un gran incremento en la compra de cigarrillos sin humo para dejar de fumar o poder hacerlo en los lugares prohibidos por la ley · Salud va a comprobar ahora su efectividad.

Los cigarrillos electrónicos son la única solución para los fumadores que no pueden pasar sin la sensación de tener un cigarro en la mano en bares, restaurantes o discotecas. Además, son una de las terapias elegidas por otros muchos que deciden dejar de fumar haciendo uso de métodos disuasorios como este.

Por su importante 'misión', el cigarro electrónico ha entrado de lleno en el 'top ten' de ventas de productos antitabaco después de la entrada en vigor en enero de la nueva ley. En este mes, la demanda de este producto en las farmacias se ha desbordado y ha pillado también in fragantis a los productores, que han tenido que acelerar su fabricación para poder dar respuesta a la petición de ventas. Aunque en las farmacias sigue habiendo stock, hay algunas en las que faltan recambios y otras que ya piden directamente al fabricante porque en el proveedor habitual se han agotado.

"Se ha agotado en muchos almacenes pero nosotros tenemos porque pedimos directamente al fabricante. En enero la venta ha crecido mucho porque supuestamente quita el hábito de tener un cigarro en la mano", explica Ignacio Nestares, de la farmacia Nestares de Gran Capitán. Igual están en la farmacia Tallón. "En enero ha aumentado la venta una barbaridad pero seguimos teniendo porque pedimos más con previsión", asegura Juan de Dios Jiménez, quien explica que mucha gente acude a preguntar y finalmente lo compra "por probar" para ver si consiguen dejar de fumar o fuman menos.

En la farmacia Santamaría confirman que "los laboratorios se han visto superados por las ventas" y que aunque tienen los cigarrillos "lo que faltan son recargas". Una falta de productos consecuencia directa de ese "aumento" de ventas en enero. "Hay gente que no aguanta tomar un café o una copa sin tener un cigarro en la mano y como ese echa vapor de agua pues ayuda para los que tienen ese hábito", matiza Begoña Hita.

Lo mismo ocurre en las farmacias de 24 horas de la Avenida de Dílar junto a las fuentes y la Martín Valverde en Reyes Católicos. "Sí, tenemos cigarrillos y también hemos notado un aumento de ventas importante", explica Mar Oviedo. "Viene mucha gente a preguntar y a asesorarse sobre los distintos métodos y aunque no es lo que más se vende para dejar de fumar sí lo están comprando muchas personas", dice Isabel Alguacil.

A pesar del inesperado éxito nadie sabe a ciencia cierta si este producto ayuda a dejar de fumar. Cuando un paciente acude al médico para abandonar este hábito, los especialistas le recetan otros productos ya conocidos como pastillas, chicles o parches. Sin embargo, ni siquiera estos profesionales saben si el cigarrillo electrónico tiene propiedades terapéuticas. De ahí que la Consejería de Salud anunciase la semana pasada que encargará un análisis pormenorizado de sus componentes para corroborar que se adecuan a los términos en los que se ofrecen a los consumidores y evitar posibles fraudes o efectos adversos para la salud". Esta actuación que pretende llevar a cabo la Administración choca con la opinión de los farmacéuticos ya que si Sanidad ha autorizado su venta en las farmacias, ¿por qué quiere ahora investigar algo que ellos mismos han permitido?

El problema reside en que este producto no es un medicamento y no ha pasado por los controles sanitarios pertinentes. De hecho, en la propaganda de una de las marcas más vendidas reza: "Cigar-Clean no es un producto sanitario". Por eso, Sanidad quiere asegurarse de que no contienen ningún tipo de sustancia que cree adicción en los usuarios.

Además, su funcionamiento también hay que estudiarlo. Se supone que sólo tienen vapor de agua. No tienen nicotina aunque sepan a ella. Sin embargo, tal como entiende la Administración andaluza, si éste contiene nicotina debería ser autorizado por la Agencia del Medicamento como terapia sustitutiva. Si sólo hay vapor de agua, tendrán que asegurarse de que, como mínimo, esas inhalaciones no sean perjudiciales ni fraudulentas.

Habrá que esperar al estudio para ver qué hay detrás del negocio.

Fuente: http://www.granadahoy.com/article/granada/899075/cigarro/electronico/top/ten/ventas.html

Esta actuación que pretende llevar a cabo la Administración choca con la opinión de los farmacéuticos ya que si Sanidad ha autorizado su venta en las farmacias, ¿por qué quiere ahora investigar algo que ellos mismos han permitido?

¡Epic Fail!

Yo solo espero que los resultados de dichos estudios sean dados a conocer con objetividad y espero de mis compañeros vapeadores que en cuanto dichos estudios estén disponibles los leamos y los analicemos detenidamente, desde ahora les pido que no se vayan a dejar llevar por lo que diga la Administración en la conferencia de prensa que seguramente sostendrá para dar a conocer los resultados, ya nos pasó una vez con la FDA, nos dijeron la verdad a medias y distorsionada y al final resultó que sus propios estudios confirman que los cigarros electrónicos son muchísimo menos dañinos que los normales, ha estar muy atentos.

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